Gastroenteritis dieta pdf
La gastroenteritis no suele ser grave, pero puede provocar deshidratación. Las formas más leves pueden tratarse en casa bebiendo líquidos. Sin embargo, las personas mayores, los niños pequeños y las personas con un sistema inmunitario debilitado corren el riesgo de desarrollar enfermedades más graves.
Acuda al médico inmediatamente si su hijo no puede retener un sorbo de líquido o presenta deshidratación (boca seca, ausencia de orina durante 6 horas o más, o letargo). Los bebés menores de 6 meses deben ser vistos siempre por un médico si tienen gastroenteritis.
Los adultos y los niños mayores deben acudir al médico si presentan fiebre, dolor abdominal intenso, sangre en la diarrea o signos de deshidratación, como sed y disminución de la micción, letargo, boca seca, ojos hundidos o sensación de desmayo al ponerse de pie.
El gastro sólo debe durar unos días y normalmente no requiere tratamiento. Los medicamentos para las náuseas o la diarrea pueden ser útiles para los adultos, pero pueden no ser seguros para los niños. Los antibióticos rara vez son útiles.
El tratamiento más importante de la gastroenteritis es beber líquidos. Para los niños pequeños es más fácil beber sorbos frecuentes que una gran cantidad de una sola vez. Siga bebiendo con regularidad aunque esté vomitando. También puedes comprar líquidos rehidratantes en la farmacia. Son los mejores líquidos en caso de gastroenteritis, sobre todo para los niños.
¿Son buenos los huevos para la gastroenteritis?
Puede empezar a comer alimentos blandos cuando lleve varias horas sin vomitar y sea capaz de beber líquidos claros sin sufrir más molestias. Las galletas de soda, las tostadas, los fideos naturales, la gelatina, los huevos, el puré de manzana y los plátanos son buenas primeras opciones.
¿Qué es lo mejor que se puede beber cuando se tiene gastroenteritis?
Beber muchos líquidos claros
El agua, los refrescos claros (remuévelos bien para que suelten más gas), el té de hierbas descafeinado, el caldo o los sustitutos de electrolitos de venta sin receta son formas estupendas de evitar la deshidratación cuando se tiene una gripe estomacal con diarrea o vómitos frecuentes.
¿Qué alimentos desencadenan la gastroenteritis?
bebidas con cafeína, como el café y el té, y algunos refrescos. alimentos ricos en grasas, como los fritos, la pizza y la comida rápida. alimentos y bebidas que contienen grandes cantidades de azúcares simples, como las bebidas azucaradas y algunos zumos de frutas. leche y productos lácteos, que contienen el azúcar lactosa.
Tratamiento de la gastroenteritis
La gastroenteritis es una afección que suele aparecer después de ingerir alimentos. Es una inflamación del estómago que puede provocar náuseas, vómitos, diarrea y fiebre. Suele estar causada por un virus, pero también puede deberse a una bacteria.
No existe una respuesta única a la pregunta de cómo tratar la gastroenteritis, ya que puede deberse a diversas causas, como el uso excesivo de antibióticos, una infección vírica o una intoxicación alimentaria. Sin embargo, algunos consejos que pueden ayudar incluyen evitar el contacto cercano con cualquier persona que tenga gastroenteritis, lavarse las manos con frecuencia y evitar enfermedades enfermizas.
Además, hay algunos alimentos que pueden ayudarte a sobrellevarla. Si usted es alguien que está en el estado en el que usted está tratando con gastroenteritis seguir leyendo hasta el final. Aquí exploraremos las opciones alimentarias más adecuadas para las personas que padecen la misma enfermedad.
Las pastas son una forma estupenda de tratar la gastroenteritis. Son saciantes y aportan suficientes proteínas a las personas que se sienten mal. También son bajas en calorías, lo que puede hacer que te sientas mejor. Son buenas porque ayudan a descomponer los alimentos y a limpiar los intestinos de cualquier infección. De hecho, las investigaciones han demostrado que las personas que comen mucha pasta tienen menos probabilidades de desarrollar gastroenteritis en el futuro.
Dieta gastro para adultos
Cuando tenga una gastroenteritis vírica, debe beber mucho líquido para reponer los líquidos y electrolitos perdidos. Es posible que vomite después de comer o que pierda el apetito durante un breve periodo de tiempo. Cuando recupere el apetito, la mayoría de las veces podrá volver a su dieta normal, aunque siga teniendo diarrea.
Cuando los niños tienen gastroenteritis vírica, los padres y cuidadores deben darles lo que suelen comer en cuanto recuperen el apetito. Los padres y cuidadores deben dar a los niños leche materna o artificial como de costumbre.
Dieta para la gastroenteritis
DiagnósticoEs probable que su médico le diagnostique una gastroenteritis vírica (gripe estomacal) basándose en los síntomas, un examen físico y, a veces, en la presencia de casos similares en su comunidad. Un análisis rápido de heces puede detectar rotavirus o norovirus, pero no existen pruebas rápidas para otros virus que causan gastroenteritis. En algunos casos, el médico puede pedirte una muestra de heces para descartar una posible infección bacteriana o parasitaria.
Si tienes un bebé enfermo, deja que su estómago repose durante 15-20 minutos después de vomitar o tener un ataque de diarrea, y luego ofrécele pequeñas cantidades de líquido. Si estás amamantando a tu bebé, deja que tome el pecho. Si toma biberón, ofrécele una pequeña cantidad de solución de rehidratación oral o de leche de fórmula. No diluya la leche de fórmula ya preparada.
Preparación para la consultaSi usted o su hijo necesitan ver a un médico, lo más probable es que primero vea a su médico. Si hay dudas sobre el diagnóstico, su médico puede remitirle a un especialista en enfermedades infecciosas.
Lo que puede hacer mientras tantoBeba mucho líquido. A medida que pueda, retome su dieta normal. Es posible que al principio pueda comer alimentos suaves y fáciles de digerir. Si su hijo está enfermo, siga el mismo planteamiento: ofrézcale mucho líquido. Cuando sea posible, empiece a hacer que su hijo coma su dieta normal. Si le está dando el pecho o leche artificial, siga alimentándole como de costumbre. Pregúntale al pediatra si sería útil administrarle una solución de rehidratación oral, disponible sin receta en farmacias.